viernes, 15 de agosto de 2014

Animal Print: El alegato de la defensa




Señores y Señoras del jurado:

En el mundo de la moda se ha perdido algo y ese algo, es la verdad. Si, en el mundo subjetivo de la moda, ese que vemos con ojos humanos, también hay verdades y así como hay verdades, también hay falsedades, injurias, calumnias. Hoy estoy ante ustedes para defender a mi cliente, el Animal Print, de las falsas acusaciones de representar una estética ordinaria y de ser cómplice de la vulgaridad. No solo mi cliente es inocente, sino que además, se le condenó antes de juicio, no se le respetó el derecho al debido proceso, no se cumplieron sus garantías y por esta razón, cuando la verdad se asome en esta corte, todos tendrán que repararlo y abrirle un espacio privilegiado en el armario, donde realmente pertenece. Les recuerdo que estamos hablando del Animal print como el estampado, como el diseño gráfico de la tela, no de ir matar a Mufasa y ponérselo; los abrigos de piel si son un crimen que no podría tener defensa alguna.

Quienes alegan que los cargos imputados son ciertos, hablan del Animal Print como si fuera una tendencia más, igual a todas, pero 'olvidan' mencionar que es la tendencia que más tiempo ha durado en vigencia, y estamos hablando de más de 70 años. ¿Por qué? Se preguntarán ustedes y yo les daré la respuesta: Porque al igual que las especies más fuertes, justo cuando todos piensan que va a morir, evoluciona. El Animal Print sigue apareciendo temporada tras temporada en diferentes formas, estilos y accesorios, reinventándose desde las pasarelas hasta la calle. En este juicio, partiríamos de la base de que el Animal Print no se puede juzgar como cualquier otra tendencia, no tiene ciclos ni etapas de madurez y declive. Para probar el argumento de la defensa, tengo los siguientes artículos de la constitución (Desde 1939 hasta 2013 en países distintos) :


Freja Beha Erichsen


La parte acusatoria presentó dentro de sus pruebas, un conjunto de fotografías de las escenas de varios crímenes y aunque lo que revelan es realmente atroz, señalan como culpable al común denominador incorrecto.  Veamos las pruebas de la contraparte:



Ningún ser humano debería ser víctima de ver esos looks, y a primera vista lo que tienen todas en común es al Animal Print, infraganti. Pero saben ¿qué más hay en esas imágenes?  El libre albedrío. Es evidente en cada uno de los elementos probatorios de la Fiscalía, que la persona que ahí aparece, en pleno uso de sus facultades y libre albedrío, tiene un fin que atenta contra las leyes de la belleza y el Animal Print no sería más que una herramienta para lograr dicho fin. En otras palabras, señores del jurado, mi cliente ha sufrido la peor de las manipulaciones. Así que la verdadera pregunta que ustedes como jurado deben responder es, si es o no justo condenar a un estampado por las acciones que emprenden a través de él los criminales más grandes de la estética contemporánea.

Para comprobar que los crímenes los cometen las personas y no los estampados, a continuación encontrarán una serie de pruebas en distintas circunstancias del Street Style, donde aparece el Animal Print obrando de buena fe.


Animal Print y Elegancia, no es una contradicción


Animal Print y Cuero es una afirmación del Glam Rock

Animal Print y piel al descubierto no implica vulgaridad
El Animal Print no es símbolo de edad
En accesorios SI. Mezclado también. 
El Animal Print no tiene que ser simple para ser legal. 
"Asegúrese de no pesar más que el animal"? - La mezquindad es la raíz de toda mediocridad en la moda.

Leopard Print Executive
Se vale TODO, no solo ' un poco'.

El Animal Print no tiene día de la semana
El Animal Print se puede usar para bien o para mal, no voy a defender las reglas para usarlo porque no creo en ellas y no creo porque la historia nos ha enseñado que si la moda no es trasgresora, es obsoleta.  Pero si les diré que en la composición de imágenes que hacemos al vestirnos existen símbolos, representaciones pictóricas e intenciones. La diferencia entre las personas culpables y las inocentes de darle un uso inadecuado al Animal Print es a dónde quieren llegar con él. Como integrantes del sistema de la moda somos juzgados por nuestras intenciones. En este orden de ideas, la presencia de mi cliente en la escena del crimen no implica que sea el responsable y las pruebas de esta defensa mostraron su proceder de buena fe y por lo tanto, su inocencia.

Queda comprobado entonces, que los chistes flojos y las críticas sin fundamento sobre el Animal Print no son más que un reflejo de nuestros prejuicios. Esos prejuicios sociales que por momentos parecen inamovibles, dejan ver el largo camino que nos falta por recorrer, lo cerrados que somos de mente y lo ligeros que somos de boca para decir que todo es "lobo". No existe una razón valedera o una prueba fehaciente para asociar las evocaciones del Animal Print a la ferocidad, a la hermosura natural de los animales, a la vida fuera de la ciudad y el concreto, con la vulgaridad y con la estética barata. 

Y solo en caso de tener todavía alguna duda, aquí esta la prueba, Reina:

Anna Wintour Directora Vogue US

Y entonces, señores y señoras del jurado ¿Cuál es el veredicto? 





Nota final: Tal vez he visto mucho Suits últimamente (Muy recomendada y está en Netflix).  

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